
Comisión Europea excluye a Panamá de lista de alto riesgo por lavado
Este martes, la Comisión Europea aprobó formalmente una resolución que excluye a Panamá de la lista de jurisdicciones con alto riesgo en materia de lavado de activos y financiación del terrorismo.
La medida, que forma parte de una actualización del reglamento delegado de la UE, también retira de la lista a Gibraltar, Emiratos Árabes Unidos, Barbados, Filipinas, Jamaica, Senegal y Uganda, mientras que incorpora a países como Venezuela, Mónaco, Líbano, y Argelia.
La decisión se basó en un análisis técnico que incluyó evaluaciones del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), visitas sobre el terreno, y diálogos bilaterales con las jurisdicciones analizadas.
Cambios
Según la Comisión, Panamá ya no presenta deficiencias estratégicas en sus sistemas de prevención del blanqueo de capitales ni en la lucha contra el financiamiento del terrorismo.
Aunque la resolución ya fue aprobada, aún debe pasar por una fase de escrutinio por parte del Parlamento Europeo y del Consejo de la Unión Europea, que disponen de un plazo de un mes (ampliable a dos) para expresar objeciones. Si no se presenta oposición, la exclusión de Panamá entrará en vigor automáticamente una vez concluido ese periodo.

El presidente José Raúl Mulino, desde su llegada al poder en julio de 2024, ha criticado la inclusión de Panamá en listas discriminatorias, al punto de amenazar con impedir que empresas de países que discriminen a Panamá participen en licitaciones públicas.
Este resultado marca un giro respecto a lo ocurrido en 2023, cuando el Parlamento Europeo rechazó una propuesta similar que también intentaba sacar a Panamá, Gibraltar y otros países de la lista.
En esa ocasión, los eurodiputados argumentaron que existían pruebas recientes de que estos territorios no hacían lo suficiente para impedir la evasión de sanciones internacionales, especialmente las impuestas a Rusia por la guerra en Ucrania.
Ser parte de esta lista de alto riesgo no implica sanciones económicas directas, pero sí obliga a las entidades financieras europeas a aplicar controles reforzados sobre cualquier transacción relacionada con los países listados. Esto puede traducirse en mayores costos, retrasos y restricciones para operaciones financieras, inversiones y acceso a servicios bancarios dentro del bloque europeo.
Importancia de la exclusión
La exclusión de Panamá de la lista de alto riesgo de la Comisión Europea representa un avance clave para la reputación financiera del país y su integración en el sistema económico global.
Al salir de esta clasificación, Panamá deja de estar sujeto a controles reforzados por parte de bancos e instituciones europeas, lo que facilita las transacciones, mejora el acceso a financiamiento y envía una señal de confianza a inversionistas internacionales.
Por otro, refuerza el argumento del gobierno panameño de que se han implementado reformas sustanciales para cumplir con estándares internacionales en transparencia financiera.
El presidente José Raúl Mulino, desde su llegada al poder en julio de 2024, ha criticado la inclusión de Panamá en listas discriminatorias, al punto de amenazar con impedir que empresas de países que discriminen a Panamá participen en licitaciones públicas.
Uno de sus primeros viajes al extranjero fue a Francia, donde se reunió con el mandatario Emmanuel Macron, a quien solicitó apoyo para que el país fuera excluido de dichas listas.
Mónaco
La inclusión de Mónaco en la lista de jurisdicciones de alto riesgo por parte de la Comisión Europea marca un giro significativo en el trato regulatorio que recibe este pequeño pero influyente centro financiero.
La medida responde a deficiencias señaladas por el GAFI y el organismo regional Moneyval, especialmente en áreas como la banca privada, el sector inmobiliario, la transparencia sobre beneficiarios finales y la aplicación efectiva de normas contra el lavado de dinero.
El gobierno monegasco reaccionó rechazando la calificación y alegando que no ha sido “incluido en una lista negra”, pese a que ahora estará sujeto a controles reforzados por parte de instituciones financieras de la UE.
La decisión coincide con su inclusión previa en la lista gris del GAFI, lo que podría afectar la imagen internacional de Mónaco y endurecer las relaciones con bancos europeos, que deberán aplicar mayor diligencia en operaciones vinculadas al principado.