Gobierno lanza licitación para cubrir el faltante de distribuidoras y evitar alzas en la tarifa en 2025
Por: Alex E. Hernández V. / Faltan 82 días para que termine el año y las empresas de distribución eléctrica no tienen garantizado el suministro de energía para atender el mercado panameño en 2025. Así lo indica la resolución publicada en Gaceta Oficial por la Secretaría Nacional de Energía, que convoca para diciembre próximo una licitación de corto plazo para que las empresas generadoras ofrezcan potencia y energía a las empresas ENSA, Edemet y Edechi, estas dos últimas propiedad del grupo Naturgy.
«Que, a la fecha, las empresas de distribución eléctrica presentan faltantes de potencia y energía, especialmente la distribuidora Elektra Noreste, S.A. (ENSA), situación que produce riesgos en los costos de la tarifa eléctrica de los clientes finales al estar expuesta a compras en el mercado ocasional que pueden resultar en un incremento tarifario, como el previsto para el segundo semestre del año en curso, y que fue necesario diferir en el tiempo con el fin de estabilizar la tarifa eléctrica», indica la resolución.
La Secretaría fijó el 10 de diciembre de 2024 como el día en que las empresas generadoras deben entregar sus propuestas, mientras que el suministro de potencia y energía se hará efectivo desde el primero en marzo del próximo año.
Durante el primer semestre de este año, se aplicó un incremento entre el 2% y el 15% a los clientes de ENSA, luego de que la compañía no tenía contratado el 100% de la energía que utilizaría entre enero y junio, lo que obligó a la distribuidora a comprar electricidad en el mercado ocasional, donde los precios son más altos.
En el caso de la licitación convocada para diciembre próximo, se estableció que en el renglón de capacidad podrán participar todas las centrales que tengan sus unidades operativas al momento de lanzarse la convocatoria, mientras que en el renglón de despacho de energía solo podrán participar plantas hidroeléctricas, eólicas, solares y de biomasa.
Las licitaciones de energía se dividen en contratos de potencia y contratos de energía para optimizar la gestión del sistema eléctrico, diferenciando los servicios que cada uno ofrece. Los contratos de potencia garantizan la capacidad de generación disponible para satisfacer la demanda máxima, mientras que los contratos de energía se enfocan en la cantidad de energía que se puede entregar a lo largo del tiempo.
Para los conocedores de la materia, esta separación fomenta la competencia entre diferentes tipos de generadores, permite una asignación más eficiente de recursos y ayuda en la gestión de riesgos y costos asociados con la fluctuación de la demanda y la oferta.
En julio pasado, cuando entró la administración del presidente José Raúl Mulino, la Secretaría Nacional de Energía suspendió la licitación de largo plazo para centrales de energía renovable, luego de determinarse que los requisitos de contratación no se ajustaban a la normativa del mercado eléctrico panameño. Esta licitación introducía el concepto de almacenamiento de energía en sistemas de baterías, tecnología que todavía no está regulada en el país.