Diputados aprueban financiar la CSS con parte del impuesto al alcohol y tabaco pese a caída en ingresos tributarios
La Asamblea Nacional avanzó en la reforma a la Ley Orgánica de la Caja de Seguro Social (CSS) con la aprobación del segundo bloque del proyecto 163.
Uno de los puntos clave es la decisión de utilizar ingresos provenientes de impuestos selectivos a productos como bebidas gaseosas, vino, cerveza y tabaco para financiar parte de los programas de la CSS. Sin embargo, esta medida representa un reto para el gobierno, dado que la recaudación fiscal ha mostrado una tendencia a la baja.
Además de esta fuente de financiamiento, la reforma establece que el 90% de los fondos de inversión de la CSS sean manejados por el Banco Nacional de Panamá, mientras que solo un 10% quedará en manos de la banca privada.
Según el diputado Alaín Cedeño, presidente de la Comisión de Trabajo, Salud y Desarrollo Social, esta medida responde a la demanda de los ciudadanos de asegurar la estabilidad de los recursos de la institución.
Otro punto aprobado es un aporte estatal anual de 997.5 millones de dólares para reforzar el programa de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM), el cual ha sido señalado como insostenible a mediano plazo.
De acuerdo con el director de la CSS, Dino Mon, el gobierno necesitará incrementar sus aportes en los próximos meses para garantizar el pago de pensiones y jubilaciones, ya que los fondos actuales no serán suficientes.
Entre las modificaciones también se aprobó un incremento escalonado de la cuota obrero-patronal, tal como solicitaron las micro y pequeñas empresas.
Asimismo, se establece que las reservas de la CSS deberán invertirse con criterios de seguridad, rendimiento y transparencia, garantizando la cobertura de prestaciones presentes y futuras.
El debate sobre el tercer bloque de reformas incluirá cambios en la edad de jubilación.
La propuesta contempla un incremento de tres años, lo que dejaría la edad en 65 años para los hombres y 60 para las mujeres. Este ajuste busca aliviar la presión financiera sobre el sistema, pero ha generado preocupación entre distintos sectores de la sociedad.
El ministro de Economía y Finanzas, Felipe Chapman, ha advertido que cualquier cambio que implique nuevos impuestos debe ser analizado dentro de una reforma fiscal integral y no dentro de las modificaciones a la CSS.
Esto podría generar fricciones dentro del Ejecutivo, ya que la viabilidad de las reformas dependerá en gran medida de la capacidad del gobierno para sostener los aportes necesarios.
A medida que el debate avanza, la reforma a la CSS se perfila como uno de los proyectos más trascendentales en las últimas décadas. Aunque el gobierno y la Asamblea buscan consensos, la sostenibilidad del sistema de pensiones sigue siendo un desafío, especialmente ante la incertidumbre en la recaudación fiscal y la creciente demanda de fondos para garantizar el pago a jubilados y pensionados.
